Los vecinos de Pueyo inauguraron el sábado dos nuevas instalaciones de uso público, un Centro Social-Gizarte Etxea ubicado en el edificio que albergó el antiguo parvulario de las localidad y más recientemente el gaztetxe, y el mirador interpretativo Montes de la Valdorba instalado en el punto más alto de la población, junto a la ermita de Santiago, un lugar privilegiado desde donde se divisan los montes de la Valdorba y el monte del Conde, dos espacios protegidos de gran valor ecológico y naturalístico.
Los actos de inauguración dieron comienzo con la concentración de decenas de vecinos en el atrio de la ermita de Santiago. A la cita acudieron los miembros de la corporación municipal y ediles de la anterior legislatura, que es cuando se efectuaron las obras del mirador, además del director general de Desarrollo Rural, Juan Pablo Rebolé, la presidenta del Consorcio de Desarrollo de la Zona Media y concejala de Bildu en Tafalla, Cristina Arconada, y representantes de otros ayuntamientos valdorbeses.
La agente de Desarrollo Local del Consorcio, Esther Capellán, recordó la apuesta de este organismo para apoyar la iniciativa del Ayuntamiento de Pueyo de instalar en el punto más alto del casco urbano un mirador interpretativo. Capellán señaló que "uno de los recursos más importantes que tiene Pueyo, debido a su estratégica ubicación, son sus vistas, además de la producción, que realizan varios vecinos, de plantas aromáticas y medicinales". Esas plantas, como la santolina, lavandina, tomillo o romero, adornan, embellecen y aromatizan todo el entorno del mirador.
Este espacio fue acondicionado hace dos años y contó con una inversión de 59.457 euros. Las obras de jardinería fueron realizadas por personal de Tasubinsa. Los vecinos, en auzolan, completaron los arreglos con la pavimentación del atrio de la ermita de Santiago. Este acto fue amenizado por el coro parroquial de Pueyo, dirigido por el acordeonista José Antonio Álvarez.
Seguidamente, todos los asistentes se trasladaron al nuevo Centro Social-Gizarte Etxea, un edificio de tres plantas con un semisótano que alberga la mayor parte de las instalaciones eléctricas y calderas, además de una pequeña sala insonorizada. La planta principal dispone de una sala multiusos de 80 metros cuadrados, además de aseos y ascensor. En ese espacio está previsto ofertar charlas, cursillos, talleres y sala de gimnasia. La planta superior, dispone de una sala de 40 metros cuadrados, donde se acondicionará una biblioteca, un espacio con ordenadores y dos amplias terrazas abiertas al exterior.
Este edificio fue construido con la mano de obra de los propios vecinos en 1944 y fue un colegio de párvulos regentado por monjas, por iniciativa y donación de su fundadora, Asunción Blanco Pérez. Tras perder su uso original, en el año 2.000 se extinguió esta Fundación y el edificio fue utilizado como gaztetxe por los jóvenes. Ahora, el Ayuntamiento, acogiéndose al Programa de Desarrollo Rural 2007-2013, ha realizado una inversión de 142.857 euros, de los cuales 100.000 se han conseguido con ayudas públicas. Para reducir costes, en una obra ejercutada por Construcciones Arregui, una treintena de vecinos acudieron durante ocho sábados a trabajar en auzolan para hacer labores de limpieza y desescombro.
El alcalde, Juan Cruz Edurza, se congratuló por la inauguración de este espacio que albergará diferentes actividades socio-culturales y agradeció la colaboración de vecinos e instituciones. Cristina Arconada también felicitó a los vecinos por poder contar con estos dos nuevos servicios y Juan Pablo Rebolé elogió el trabajo "tan meritorio" en auzolan del vecindario. Por último, el párroco, Gregorio Martínez, bendijo las instalaciones expresando su deseo de que "se conviertan en un centro de encuentro, de humanismo y de vida cristiana".
Diario de Noticias
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