Esta mañana en Tudela se ha consumado la monumental toma de pelo a todos los navarros. Con la solitaria nota de dignidad del ayuntamiento de Peralta-Azkoien, los representantes de los pueblos congozantes han decidido rubricar el acuerdo alcanzado con el ministerio de Defensa para prorrogar el arrendamiento del polígono de tiro durante otros 20 años. Han tenido que oír, eso sí, los gritos de protesta de decenas de personas que mediante consignas como “las Bardenas para la paz”, “Bardeak herriarentzat”, “No más bombas por dinero” han expresado su indignación por esta vergonzosa transacción mercantilista en la que se vende el bienestar y la seguridad de tantos miles de navarros y aragoneses.
Para cuando quienes, respondiendo a la convocatoria de la Asamblea anti-polígono se han aproximado en torno a las nueve y media al palacio de Bardenas, los miembros de la Junta estaban ya en el interior. No querían, al parecer, que les viesen entrar. Fuera, un desproporcionado despliegue de las Policía Nacional y Foral, que han tomado nota de la documentación de muchos de los presentes. Ante la falta de acuerdo para realizar la concentración conjuntamente, los seguidores del Manifiesto pro-Bardenas han acordado retirarse y manifestarse media hora después que la Asamblea Antipolígono.
Además de la prórroga del contrato se ha votado también la aceptación de la cesión de la titularidad jurídica del terreno a la comunidad de Bardenas. Gayarre ha defendido su actuación y ha recordado que en el 2001 el ministerio español de Defensa declaró el polígono "de interés general, que es el paso previo para la expropiación”. Según el presidente de la Junta, ahora van a ser propietarios de pleno derecho de las 42.000 hectáreas.
Después tres miembros de la Asamblea Antipolígono han accedido a la reunión y han mostrado carteles en los que se leía "Polígono de tiro desmantelamiento", a la espera de poder intervenir en el punto de ruegos y preguntas lo que, según ha señalado su portavoz, Milagros Rubio, finalmente no han podido hacer, puesto que se ha eliminado ese punto del orden del día. No obstante ha incidido en que "lo más importante es que se ha hecho historia diciendo sí a un polígono de tiro y bombardeo en las Bardenas a cambio de dinero y de la propiedad de un terreno que pertenece a Navarra". Finalmente ha señalado que aquí no termina la historia ni las movilizaciones en defensa de la paz ni el trabajo por una oposición tenaz al polígono de tiro de Bardenas.
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