Seguro que ya se habían dado cuenta, pero casi siempre hay niebla en Castejón. Ayer, cuando pasé por el puente y le miré al Ebro, el día estaba despejado y el aire llevaba los vapores de las chimeneas de las térmicas para otro lado. Pero la niebla se masticaba, como el silencio que reina diez días después de la sentencia que declara ilegal el segundo grupo de la central de Hidrocantábrico.
La sentencia dice que la térmica debería estar al menos a 2.000 metros del núcleo urbano, y resulta que no está ni a 500 de las primeras casas. Dice también que el Gobierno de Navarra le dio a la empresa una autorización que no le tenía que dar -el famoso PSIS- y que ambos tienen que pagar las costas del juicio que tan elegantemente les han ganado los de la Plataforma Ribera + Centrales No.
Pero también la justicia es neblinosa y espesa y, de momento, nada se mueve, y ni se menta lo que parece impepinable: la paralización de la central. Solo que los servicios jurídicos del Gobierno de Navarra están estudiando la sentencia, y mucho al parecer, porque o se están tomando su tiempo y/o andan en la niebla del puente foral. Total, diez días no son muchos en toda una década, la que llevan cuestionadas y denunciadas estas centrales, que atesoran nada menos que tres sentencias negativas para su ampliación, y ahí continúan. Y no están solas, que los castejoneros no solo tienen encima las chimeneas de Hidrocantábrico: también tienen las de la otra, la térmica que Iberdrola tiene en el otro lado del pueblo, y a la que le proyectan añadir otra más. La tramitación de esta cuarta central prosigue sigilosa, pero tiene ya las bendiciones del Gobierno de Barcina y Jiménez y todas las enmiendas desestimadas.
Otra niebla diferente, pero mucho mas espesa, es la que envuelve la gestión del anterior alcalde socialista, marcada por las irregularidades que detectó la Cámara de Comptos y que ha dejado a Castejón como uno de los municipios mas endeudados de Navarra, con once millones de pufo. Y eso que calculan que el Ayuntamiento habría cobrado en estos años de nieblas nada menos que 21 millones de las dos empresas.
Si hoy, en este inmaculado día de la Inmaculada, pasan por allí, fíjense bien: seguro que se ve alguno de los nublaos que se ciernen sobre la villa. Y no digan que no les importa, que Gobierno y Eléctricas hacen las cosas mal, pero luego tenemos que pagar todos a escote las costas del juicio.
Pili Yoldi, en Diario de Noticias
La sentencia dice que la térmica debería estar al menos a 2.000 metros del núcleo urbano, y resulta que no está ni a 500 de las primeras casas. Dice también que el Gobierno de Navarra le dio a la empresa una autorización que no le tenía que dar -el famoso PSIS- y que ambos tienen que pagar las costas del juicio que tan elegantemente les han ganado los de la Plataforma Ribera + Centrales No.
Pero también la justicia es neblinosa y espesa y, de momento, nada se mueve, y ni se menta lo que parece impepinable: la paralización de la central. Solo que los servicios jurídicos del Gobierno de Navarra están estudiando la sentencia, y mucho al parecer, porque o se están tomando su tiempo y/o andan en la niebla del puente foral. Total, diez días no son muchos en toda una década, la que llevan cuestionadas y denunciadas estas centrales, que atesoran nada menos que tres sentencias negativas para su ampliación, y ahí continúan. Y no están solas, que los castejoneros no solo tienen encima las chimeneas de Hidrocantábrico: también tienen las de la otra, la térmica que Iberdrola tiene en el otro lado del pueblo, y a la que le proyectan añadir otra más. La tramitación de esta cuarta central prosigue sigilosa, pero tiene ya las bendiciones del Gobierno de Barcina y Jiménez y todas las enmiendas desestimadas.
Otra niebla diferente, pero mucho mas espesa, es la que envuelve la gestión del anterior alcalde socialista, marcada por las irregularidades que detectó la Cámara de Comptos y que ha dejado a Castejón como uno de los municipios mas endeudados de Navarra, con once millones de pufo. Y eso que calculan que el Ayuntamiento habría cobrado en estos años de nieblas nada menos que 21 millones de las dos empresas.
Si hoy, en este inmaculado día de la Inmaculada, pasan por allí, fíjense bien: seguro que se ve alguno de los nublaos que se ciernen sobre la villa. Y no digan que no les importa, que Gobierno y Eléctricas hacen las cosas mal, pero luego tenemos que pagar todos a escote las costas del juicio.
Pili Yoldi, en Diario de Noticias
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