Los vecinos de Funes se sienten impotentes y alertados por la oleada de robos que vienen sufriendo esta semana en cuatro casas, un negocio y un coche. Los asaltantes incluso han llegado a subir a los dormitorios de los atracados mientras éstos estaban durmiendo. Una de las víctimas llegó a hablar desde su cama con el ladrón pensando que era su hijo y, en otro caso, el malhechor sustrajo el contenido del bolso de mano de otra vecina."Nos sentimos vulnerables e impotentes porque si alguien le echa tanta cara como para subir a una vivienda donde hay gente, pensamos que pueden llegar a la violencia. Los vecinos están muy enfadados por este motivo", explicaba ayer el alcalde de Funes, Antonio Ulzurrun.
Los robos se han sucedido principalmente en el casco antiguo de la localidad, entre las 2.00 y las 3.00 de la madrugada. Se ha accedido a las bajeras rompiendo el bombín de la puerta. La noche más inquietante fue la del miércoles al jueves, cuando se produjeron robos en dos casas, un coche y un negocio. La Guardia Civil se está haciendo cargo de las investigaciones pero por lo pronto no ha habido detenidos. Sólo se interrogó a un sospechoso aunque éste quedó en libertad por falta de pruebas.
El alcalde se reunirá el lunes en Pamplona con la delegada del Gobierno en Navarra para hablar del asunto. "Es una cita que ya estaba prevista porque este problema se veía venir a causa del desempleo. Hasta ahora, los robos habían sido los habituales, en casetas de campo", apuntaba Ulzurrun. Además, desde el Ayuntamiento se pide a los vecinos que extremen sus precauciones de seguridad y eviten descuidos.
Diario de Noticias
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