Ante las acusaciones vertidas en los medios de comunicación por la señora Ciprés y su entorno, el grupo de vecinos que impulsó el voto en blanco, opción que eligieron 305 personas el pasado 20 de noviembre, quiere aclarar:
Este grupo de vecinos bajo ningún concepto ha coaccionado o amenazado a ninguna persona de este pueblo para conseguir el voto en blanco. Nuestra labor ha sido solo la de informar de otra opción existente como alternativa a la única candidatura presentada (hecho totalmente democrático y lícito).
Rechazamos rotundamente, y no vamos a permitir que se nos descalifique, como ha hecho la presidenta de Derecha Navarra y Española y algunos de sus miembros, llamándonos proetarras y violentos. Ninguno de los integrantes de este grupo se ve representado en estos adjetivos y estamos estudiando tomar acciones legales a ese respecto. Basta mirar el resultado de las elecciones al Parlamento para comprobar nuestra pluralidad política.
Asimismo, no nos sentimos orgullosos por lo ocurrido el domingo. Deseamos que no se vuelva a dar en nuestro pueblo una situación tan tensa, fruto de la indignación de vecinos y de su impotencia, pero también de las provocaciones de la señora Ciprés y sus acompañantes.
Es justo destacar el porqué de la indignación del 94,4% del pueblo. DNE se presentó a última hora, sin dar opción a los vecinos de presentar una candidatura alternativa. No realizó campaña alguna, ni dio a conocer cuáles eran sus propuestas. Buzoneó por la noche. La primera vez que vimos al futuro alcalde fue el día de la votación. Además, cinco de las siete personas de la lista se presentaron por otras localidades en mayo, por lo que no tendrían derecho a resultar elegidos. Dos de ellos se presentaron al Ayuntamiento de Madrid. Sí, se presentaron en Madrid. Son de allí.
A pesar de todo esto, durante cuatro años gestionarán el dinero de nuestros impuestos como les venga en gana, tendrán a su disposición todo el patrimonio y los bienes del pueblo, así como capacidad para legislar sobre nuestras vidas sin que podamos ejercer siquiera el derecho a oposición. Las decisiones que tomen pueden hipotecar nuestro futuro durante largo tiempo, pero ellos no sufrirán las consecuencias ni ahora ni después, ya que ninguno vive en Garínoain. Seremos nosotros los únicos afectados.
Recalcamos que hay gente del pueblo dispuesta a tomar las riendas del Ayuntamiento. Por ello les pedimos que renuncien y se marchen. Han dicho que quieren lo mejor para el pueblo pero, de momento, lo único que han hecho es aprovechar la situación para salir en los medios a insultarnos. Rogamos a estos medios que no den voz a estas personas para que no usen a Garínoain como su altavoz.
Nuestro argumento de más peso es su escasísimo respaldo popular, 5,6% de los votos frente al voto masivo en blanco, el 94,4% del total. El voto blanco ganó. Por todo esto, invitamos a todos los políticos navarros a hacer reflexión sobre si éticamente se sentirían legitimados para gobernar un municipio, comunidad u organismo con un rechazo del 94,4 % de los votantes. Sabemos que legalmente es legítimo, pero ¿lo es moralmente? ¿Está dentro de la normalidad democrática?
Vicente García Gil, Delphine Roselyne Lacaze, Aritz Intxusta, en representación de vecinos de Garínoain
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