¿Cómo ve la salida a la situación de crisis en el
Gobierno de Yolanda Barcina, porque parece que ha dejado correr un poco
el tiempo?
Esta es una tónica muy habitual en la política navarra cuando
las cosas no van bien. Esperar a que pasen las fiestas. Barcina se
encuentra ahora con un Gobierno en minoría parlamentaria que hace muy
difícil el que se puedan reconducir, por ejemplo, los presupuestos.
Era casi imposible cesar al secretario general del PSN y pretender que los socialistas continuaran en el Gobierno.
Supuestamente era la pretensión de la presidenta del Gobierno
de Navarra. Creo que dice muy poco sobre la solidez de decisiones
políticas como estas.
Ahora, Yolanda Barcina les ha instado a presentar una
moción de censura, lo que obligaría a los partidos de la oposición a
presentar un candidato, algo que parece muy difícil.
No debiera serlo si tenemos la convicción desde una posición
progresista y, sobre todo, desde la necesidad evidente de que hay que
coger el toro por los cuernos. Pero en estos momentos las relaciones del
resto de la oposición con el Partido Socialista pasan o debieran pasar
por un reforzamiento de la confianza, que debe ser el propio PSN quien
lo marque.
También en esto ya se ha visto cómo ha actuado el PSN
en otras ocasiones. ¿Ustedes se fían de un posible acuerdo con los
socialistas?
Hablaba por eso de un necesario reforzamiento de la confianza.
El Partido Socialista ha jugado demasiadas veces al cuento de Pedro y
el lobo, y ha quebrado demasiadas veces la confianza de la oposición.
Del Gobierno navarro al Ayuntamiento de Pamplona,
porque Enrique Maya también se ha estado apoyando en el PSN. Se supone
que se le va a complicar también.
Se le viene complicando desde hace ya unos cuantos meses.
¿Cómo están las cuentas del Ayuntamiento?
Pues en estos momentos con una capacidad de deuda muy mermada.
Yolanda Barcina endeudó a la ciudad muy por encima de lo razonable.
¿Los movimientos que estamos viendo en la izquierda
abertzale con reagrupamientos terminan de clarificar también en algo el
panorama en Navarra?
Creo que son procesos más que interesantes, sobre todo, desde
que se produce la legalización de Sortu, algo que yo creo que el
conjunto de las fuerzas democráticas en Euskal Herria, en general,
veníamos solicitando.
El rechazo a los recortes de Mariano Rajoy ha sido casi unánime en el Congreso de los Diputados, pero tiene mayoría absoluta.
Claro. La aritmética parlamentaria deja las manos
completamente libres al Gobierno del PP para poder llevar a cabo el
control del déficit de la manera que nos lo ha propuesto, o de la manera
que le han dictado en Europa. Lo cierto es que, salvo el apoyo de UPN,
el resto de los grupos, incluso partidos conservadores, han mostrado su
profunda discrepancia con el grueso de las medidas. Pero esa mayoría
absoluta deja las manos absolutamente libres al Partido Popular.
Al ver que Rajoy está haciendo exactamente lo
contrario de lo que anunció en la campaña electoral y de lo que recogía
su programa, ¿cree que debería someterse a algún tipo de consulta
ciudadana?
Sería fundamental que medidas tan profundas como reducir las
prestaciones por desempleo, recortar las capacidades de las comunidades
autónomas... esto debería pasar por la opinión de los ciudadanos, sin
duda alguna.
¿Cree que el PP se está aprovechando de la coyuntura para meter de rondón otras cosas que le apetece aplicar?
Fue una de las bases de la campaña que GeroaBai llevó a cabo
en las elecciones generales del pasado 20 de noviembre, el aviso de que
se iba a utilizar la crisis económica para llevar a cabo un proceso de
recentralización.
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