LA NaBai ABIERTA DE ARALAR

Recientemente Patxi Zabaleta ha realizado unas declaraciones afirmando que Na-Bai está abierta a quien firme sus principios. Me parece que en tal manifestación hay dos errores de bulto, una en la forma y otro en el fondo.

En cuanto al la forma me parece difícil de encajar estar abierto a la ampliación de la coalición, sin que ésta tenga que hacer ningún esfuerzo en la colaboración con otras fuerzas políticas. Supongo que implícitamente se está dirigiendo la oferta a IUN, ya que no creo que ninguna otra fuerza política navarra pueda estar interesada en integrarse en Na-Bai. Aralar ha repetido en varias ocasiones esta oferta a IUN, pero todos sabemos que no es posible pretender que ese partido pase a formar parte de la coalición si no hay un trabajo de conocimiento mutuo, de búsqueda de objetivos y puntos de vista comunes. Por lo que me parece que tal ofrecimiento supone hacer un brindis al sol; ya que el mensaje parece ser: ven aquí, intégrate en nuestro proyecto y no discrepes con nuestras líneas de trabajo. ¿Alguien cree que con tal ofrecimiento alguna fuerza política pueda estar interesada en integrarse en la coalición? ¿Es eso mantener una actitud abierta? Además debemos considerar que no estamos hablando de un pequeño partido regionalista con escasas posibilidades electorales, sino con un partido con representación en todo el estado, que en las últimas elecciones nacionales recogió casi un millón de votos. Mi actitud es muy crítica en este aspecto porque soy de los que en Na-Bai pensamos que la participación de IUN en la coalición era algo tremendamente positivo, para aglutinar a todo el espectro político navarro situado fuera del centro-derecha y del PSN (sin no tenemos en cuenta a Batasuna, por estar ilegalizada).

Pasando de las formas al sustrato de las declaraciones, creo que se debe realizar una importante reflexión. En la actualidad hay una propuesta organizativa para la coalición firmada por Aralar-EA-PNV, que no sólo dificulta (por no decir impide) la posibilidad de ampliar la coalición con otros partidos, sino que está dificultando enormemente la permanencia en la colación de Batzarre y del bloque de independientes (o no afiliados). Esta propuesta organizativa modifica en tal medida la situación actual que me parece que lo lógico sería decir que Na-Bai se ha terminado y que ahora se abre un nuevo ciclo en el que los tres partidos citados plantean una nueva coalición (aunque lleve el mismo nombre), con unos objetivos y funcionamiento distintos. Batzarre e independientes están por la labor de continuar con los objetivos (posibilitar el cambio en Navarra, aglutinar el voto de izquierdas fuera del PSN…) y funcionamiento actuales (paridad en la permanente, posibilidad de votar diferente…); auque estén abiertos a pequeñas modificaciones organizativas que mejoren el funcionamiento, siempre que no rompan el espíritu aperturista y no exclusivamente nacionalista de 2007. En cambio los tres partidos nacionalistas están por una coalición que sólo se abre hacia el electorado de Batasuna, pero que sacrifica los actuales apoyos de gentes de izquierda no-nacionalista y de independientes; además de dificultar en gran medida las posibilidades de entendimiento con el PSN (necesario para lograr el cambio en Navarra). Parece que estos tres partidos no están dispuestos a retroceder ni un ápice en tal propuesta de organización, a pesar de que Batzarre e independientes han manifestado que no pueden aceptarla. Ya que a pesar de que Maiorga Ramírez diga lo contrario, las líneas rojas marcadas por Batzarre son del todo incompatibles con la propuesta de los otros partidos; y los independientes en una votación con aplastante mayoría se han manifestado en contra de tal acuerdo.

En la misma nota de prensa Zabaleta manifiesta que los independientes que participan en la permanente no deben tener derecho a voto, porque no representan a nadie, al no conformar los independientes un partido político. Estoy de acuerdo en que cada independiente puede tener un punto de vista porque los hay de diferentes ideologías; pero entonces me pregunto: ¿Qué propone Aralar para que los independientes puedan participar en la toma de decisiones? La única propuesta parece ser la conformación de un partido que aglutine a los independientes; algo que ya se sabe que no va suceder. En Batzarre siempre hemos defendido la afiliación directa a Na-Bai como la medida más democrática para la participación de todos (independientes y afiliados a partidos) en la toma de decisiones; algo que siempre ha sido rechazado por el resto de partidos. Ante tal negativa sigo abierto a la esperanza esperando otras propuestas razonables para que los independientes puedan tener voz y voto; porque me parece que el tener a gentes independientes dota a la coalición de un gran valor cuantitativo (aumenta los electores) y cualitativo (entendimiento entre diferentes ideologías), que da una idea de política moderna y rompe con el modelo clásico de afiliación a partidos que cada vez cala menos en la sociedad.

En pocas palabras me parece que Aralar y EA están pensado en como se recompone la izquierda abertzale ante una situación que todos ansiamos y parece que puede darse a corto plazo: el punto final de ETA y la consiguiente legalización de Batasuna. Para ello están preparado una colación que encaje con estos fines y el PNV se ha subido al carro, a pesar de que en un principio se posicionó en contra del acuerdo. Este proyecto político me parece tan legítimo como cualquier otro pero creo que se puede exigir a estos partidos ser más claros con sus proyectos y coherentes con lo que dicen y hacen. En ese proyecto no interesa abrirse a izquierdas no-nacionalistas, ni interesa otorgar voto a independientes (porque supone una merma del poder de los partidos), ni interesan las posiciones de Batzarre (críticas con la ortodoxia nacionalista), ni interesa tender puentes con el PSN para poder llegar a acuerdos tras las elecciones, ni que los nabaigunes tengan potestad de decisión (lo que conformaría una estructura más horizontal y democrática), ni que pueda haber diferencias en las votaciones del parlamento (uniformizando al máximo, el lugar de posibilitar el entendimiento de diferentes posiciones), etc. Como digo este proyecto político es totalmente legítimo, pero no es el mío.

Patxi Repáraz Pérez, miembro de Batzarre Gaztea