Más de 50 personas y varias asociaciones se han adherido ya al manifiesto Por el derecho a vivir en euskera, ¡oficialidad del euskera! cuyo objetivo es hacer un llamamiento a la ciudadanía navarra para impulsar "un cambio profundo, y no superficial, que garantice el futuro del euskera". Con esta finalidad, este grupo de personas invitan a la sociedad a participar este sábado en una manifestación que partirá a las 17 horas de los cines Golem y concluirá en la plaza del Castillo de Pamplona. Sus reivindicaciones principales: la oficialidad y el derecho a vivir en euskera.
En nombre de los firmantes del manifiesto, Néstor Martínez y Aitziber Larrea se reunieron ayer con el director de Euskarabidea, Xabier Azanza, con la intención de "presentarle el manifiesto y compartir el análisis de la situación que se hace en él" y también pedirle que su adhesión personal. Sin embargo, no lograron este último objetivo.
Los convocantes le expusieron lo que, en su opinión, se puede calificar de "grave situación que vive el euskera", y para ello hicieron referencia a los diferentes estudios realizados por la UNESCO y Kontseilua. En estos informes se concluye que "de no poner medidas es una de las lenguas que puede estar en peligro de desaparición". Además, estas entidades consideran que harían falta 834 años para conseguir la normalización de dicha lengua. Sin embargo, Anzanza no comparte la opinión de los convocantes, tal y como informó Larrea.
En cuanto la actual "conculcación sistemática de los derechos lingüísticos", que viene provocada por la Ley del Vascuence, el director de Euskarabidea les comunicó que tramitará lo que el Parlamento decida, "por lo que da por legítimo, respetará y apoyará las decisiones que este marco adopte sea cuales sean". Por todo ello, Azanza no se sumó al manifiesto ni a la movilización.
cambio profundo Pese a que la actual política lingüística "ha puesto obstáculos, falsedad y restricciones a nuestros derechos", los convocantes del manifiesto aseguran que seguirán trabajando, como lo han hecho hasta ahora, "para que les sea reconocido su derecho a vivir en euskera, con total normalidad y plenamente". Abogan por un cambio en dicha política y "dejar atrás la Ley del Vascuence, que más que una ley parece una herramienta vulneradora de derechos".
Estas son sus reivindicaciones y por su consecución saldrán a la calle este sábado. Piden a la ciudadanía que se unan a ellos y trabajen por "un cambio profundo que garantice el futuro del euskera".
(Diario de Noticias)
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