Compañeras, compañeros, a muchos se nos ha acusado en los últimos meses de no ser leales al Partido Socialista, incluso se nos ha invitado a dejar de militar. Y yo me preguntó, ¿qué es la lealtad? ¿Sumisión a unas personas, a unos dirigentes? No, lealtad es coherencia con unos ideales, con unos principios.
Y es precisamente por coherencia por lo que he presentado una resolución alternativa a la planteada por la Ejecutiva Regional. Una resolución en la que se plantea realizar una oposición firme y constructiva al Gobierno de UPN, diferenciando nuestro proyecto político y mostrando una alternativa clara a la derecha en Navarra. Una resolución para la que pido vuestro apoyo y el del conjunto de la militancia, ya que en ese texto, se plantea que la decisión que se tome hoy aquí sea refrendada por las bases del partido, dada su importancia.
Creo que es un grave error entrar junto a la derecha al Gobierno de Navarra. Un grave error por principios, porque ideológicamente nos separa mucho a UPN y al Partido Socialista. Y un grave error estratégico también, porque como ya expuse aquí hace dos semanas, quién lidera un Gobierno en coalición es el único que se beneficia electoralmente de él. Tenemos antecedentes como es el caso de Cantabria.
Compañeras, compañeros, hoy cumplo 22 años. Hace 8, con 14 años, decidí afiliarme a las Juventudes Socialistas, y en cuanto pude lo hice también a este partido, al Partido Socialista. Me afilié cansado de los gobiernos de la derecha, de UPN en Navarra y del PP en el conjunto del país. Me afilié porque creo en una educación pública, y porque no quiero una educación que segregue a los alumnos por sexo. Me afilié porque creo que no existen modelos únicos de familia, porque creo que todos tenemos derecho a conformar la nuestra como y con quién queramos. Me afilié cansado de que utilizasen la tierra donde nací y donde vivó como instrumento de presión política, y porque era consciente de que la autonomía financiera que tiene Navarra nos podía permitir ser vanguardia en políticas fiscales de izquierdas, progresivas, justas.
Por esas razones y por muchas más me afilé al Partido Socialista, y por ello no quiero conformar gobierno con UPN, porque no me une, no nos une nada con ellos, acaso que en los últimos años la derecha haya evolucionado o este partido haya retrocedido, cosa que no creo que se haya dado. Me afilié porque quiero contribuir a que el Partido Socialista lideré un cambio político en Navarra, porque no quiero ser bisagra de UPN, no quiero ser cómplice de la derecha.
Cuando me uní a las filas socialsitas, lo hice convencido de que los dirigentes de mi partido asumirían responsabilidades cuando los resultados fuesen malos. Creía que tendría un líder que sería sincero con su militancia, y con el conjunto de la sociedad, y que sí decía que “con UPN no le une absolutamente nada y que está descartadísimo que fuesen a gobernar juntos” luego cumpliese con su palabra.
Compañeras, compañeros, hoy cumplo 22 años, no he visto un gobierno de izquierdas en Navarra en mi corta vida, y como dijo el escritor irlandes George Bernard Shaw, “ves cosas y te preguntas, ¿por qué? Pero yo sueño cosas que nunca fueron, y me pregunto, ¿por qué no?"
Muchas gracias, milesker.
Pamplona-Iruña, 15 de junio de 2013
(Recogido del blog de Javier Álvarez Montero)
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