lunes, 19 de agosto de 2013

SERGIO AMATRIAIN, EL ADIÓS DE UN ILUSTRE

El pasado 10 de junio el San Francisco fue testigo de la marcha del “Flaco” Sergio Amatriain. Fueron pocos los presentes: directivos, colaboradores y el propio entrenador junto a su segundo y hombre de confianza, César Monasterio; y muchos los ausentes. Una afición que pide un detalle, un momento, para compartir a nuestra manera la gloria peñista para quien fue y nos hizo grandes.

Sergio Amatriain Munárriz llegó en verano del 98 al equipo azul y negro. Atrás quedaba su época de canterano en Osasuna, Txantrea, Real Sociedad y un corto tiempo en el Promesas rojillo, hasta recalar en la plantilla que dirigía en su primer año Juan Domínguez. Juan Luis Celigüeta, excelente arquero por entonces y despistado como pocos, se refería al de calle Zolina de Iruña como ese flaco, alto y blanco, señas que anotamos desde siempre y hacía gracia a nuestro protagonista. Amatriain se hizo titular en aquel equipo que consiguió brillantemente el campeonato de liga, pero que cayó en el noveno intento de ascenso. En la siguiente temporada, la 1999-2000, se consumó por fin el ascenso. En aquel partido, disputado en Andorra, Sergio marcó el primero de los goles. Javi Muez metió el segundo.

Un mes antes el equipo había conseguido triunfalmente el quinto título de liga de Tercera, y para cerrar uno de los más grandes años, el club celebraba con pompa y alborozo el 75 aniversario. Llegado el nuevo siglo el equipo cosechó triunfos por doquier: títulos, ascensos y permanencia en Segunda B. Para entonces y en la retirada de Javi Muez, el Flaco cogió el brazalete de capitán llevándolo con orgullo hasta su retirada como jugador diez años más tarde, en la temporada 2008-2009. Fue entonces cuando pasó al cuadro técnico. Dos años como ayudante y tres como primer entrenador de la nave azul. Descenso a Tercera en su debut, título y ascenso a la Segunda B en las siguientes, y permanencia en la última contra el Amorebieta en Zornotza.

En la despedida como jugador mostramos el cuadro de honor de los jugadores con más temporadas en activo, a la sazón: Echarri, Zoca (jugador, entrenador y directivo), el recordado Manolo Ainzúa (jugador y directivo), Antonio Villarreal (jugador, entrenador y directivo), Kiko Urra (jugador y entrenador), Santi Ibáñez (jugador, directivo y entrenador), Silvino Baigorri (jugador), Javi Muez (jugador) y Sergio Amatriain.

Sergio Amatriain ha vivido intensamente una época en el club marcada por los éxitos continuos. Títulos de Tercera, promociones triunfantes, Segunda B, la Copa con Osasuna, el viaje a China…..Un tiempo en el que el club subió peldaños en su nivel y exigencias competitivas. La suerte me llevó a vivir de cerca aquella evolución con un grupo totalmente identificado. Amatriain, capitán primero y entrenador después, supo liderar un grupo sin alardes, sin titubeos, a veces solo con miradas y silencios. El vestuario, sanctus santorum del club, tuvo siempre en él reflejo de la experiencia, personalidad y solidaridad. Llegar a acuerdos con aquel grupo no resultaba difícil al recibir con la mirada primero y resultados después el mayor compromiso y esfuerzo máximo en el terreno de juego. Sergio, junto al resto de jugadores, dejó una huella difícil de olvidar. El ser peñista lo vivió hasta ese día 10 de junio que muy a su pesar, tras meditarlo mucho y sin total convencimiento, tuvo que decir adiós al club por el que luchó durante quince largos años.

Cuando la pelota ruede por el San Francisco de nuevo se nos hará difícil no verle entre nosotros, aunque a buen seguro, la despedida no será definitiva. Le seguiremos viendo de vez en cuando con ese semblante de hombre tranquilo que tanto nos costó admitir desde el banquillo local.

Gracias por todo, Sergio, y hasta siempre amigo. Beti arte


José Luis Lizarbe Osés, en La Voz de la Merindad

No hay comentarios: