Recibieron con escepticismo el nacimiento de Euskarabidea, pero los agentes navarros relacionados con el mundo del euskera confiaron en que podría abrirse "algún resquicio" y se dejase atrás "la época difícil de Pegenaute", responsable del área de política lingüística antes de la llegada de Xabier Azanza. Ahora, transcurridos casi dos años de la creación del instituto del euskera, seis asociaciones euskaltzales han suscrito un manifiesto en el que denuncian la "ineficacia" y "falta de capacidad" del organismo gubernamental, una entidad que "no ha cumplido" sus expectativas. Como muestra de ello, el texto pone de relieve que los Presupuestos Generales de Navarra para 2010, pactados entre UPN y PSN, y que verán luz verde la próxima semana, "impiden la normalización del euskera". Así, reunidos en torno a Kontseilua, el consejo de los organismos sociales del euskera, AEK, IKA, Sortzen-Ikasbatuaz, Euskal Herrian Euskaraz y Topagunea hicieron ayer pública su "preocupación" con el Gobierno de UPN y denunciaron que Euskarabidea oculta "de una forma más agradable" la misma política de "desprecio" y la "falta de instrumentos para poner en marcha una política lingüística adecuada".
Para justificar esta conclusión, los agentes ofrecieron una serie de datos. El más significativo, que en 2010 el recorte en las subvenciones a los organismos sociales que trabajan por el euskera será de 286.686 euros. De hecho, si el presupuesto total de Euskarabidea se ha visto incrementado, es sólo por que ahora se destina en él más dinero al gasto de personal, ya que en el organismo, dependiente del Departamento de Educación, se han ido introduciendo año tras años funcionarios antes pertenecientes a otras secciones del Ejecutivo foral. En este sentido, el gasto de personal del instituto del euskera en 2009 ha sido de 1.634.123 euros y para el próximo año, en cambio, se ha proyectado una cuantía de 2.271.852 euros.
Y es que, grosso modo, en 2010 sufrirán recortes las partidas dirigidas a los euskaltegis, Euskaltzaindia, el programa para desarrollar la enseñanza del euskera (el recorte es de un 53%) y las subvenciones a los Ayuntamientos para impulsar esta lengua (la partida ha pasado de 350.000 a 153.000 euros). Ante este escenario, los organismos recordaron que "es responsabilidad de los partidos políticos implantar una política lingüística adecuada".
El manifiesto de los agentes euskaltzales rechaza especialmente la política educativa del UPN y censura el "conflicto" provocado por el Gobierno para enfrentar el euskera y el inglés. "El objetivo que tienen con estos experimentos (modelo British, TIL...) es debilitar al euskera, dado que el modelo D, que cuenta con una experiencia de 30 años, ya forma personas plurilingües, que, aparte de conocer bien el euskera y el castellano, hablan también otra lengua extranjera".
Los organismos destacaron, además, que el Gabinete regionalista no tiene plan de euskaldunización "ni para Osasunbidea, ni para la Policía Foral, ni para la Administración de Justicia".
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