La construcción de las nuevas piscinas de verano de la Ciudad Deportiva de Tafalla avanza poco a poco. Su ejecución -los trabajos comenzaron en 2009- se ha visto dilatada por la actual situación económica, la cual ha provocado que determinadas ayudas y subvenciones con las que contaba el consistorio tafallés para acometer las obras se hayan visto mermadas de manera considerable. A finales del pasado año, se acometieron una serie de trabajos gracias a una subvención de 150.000 euros, una cuantía bastante inferior a la que, en un principio, el consistorio esperaba obtener por parte del Ejecutivo, la cual rondaba casi el millón.
La actual situación económica no ha permitido construir la piscina de chapoteo infantil -sí que se construyeron las otras dos que contemplaba el proyecto inicial, una olímpica y otra de tamaño mediano-. Así, según señalan desde el área de Urbanismo, la subvención de 150.000 euros "se exprimió" al máximo y se invirtió en construir los accesos y recorridos que conectan las piscinas exteriores con las ubicadas en el interior de la Ciudad Deportiva. Asimismo, se ha adaptado uno de los vasos exteriores. Según recoge el proyecto inicial, una de las piscinas cuenta con un espacio con rocas y toboganes para el esparcimiento. Sin embargo, por el momento, éstos no se han podido poner por lo que el hueco en el que se iban a instalar se ha tapado para que la piscina se pueda utilizar.
Con esta subvención también se ha plantado césped en la zona central, la que conecta las piscinas cubiertas con las exteriores, aunque aún faltaría por plantarlo en otras zonas, como en la que se ubicarán los merenderos. Para regar este césped, se utilizará un sistema de riego con criterios ecológicos en el que se reutilizará el agua. Todos estos trabajos se llevaron a cabo a finales del año pasado y constituyen un paso más en la intención del consistorio de abrir, si es posible, las nuevas piscinas el próximo verano.
La ejecución de este proyecto no ha estado exenta de polémica desde que se puso en marcha en el año 2009. Entonces, el consistorio aprobó destinar 1,3 millones del conocido como plan ZP a su construcción con los votos a favor de UPN, PSN e IT. NaBai y los dos concejales no adscritos se mostraron entonces ya en contra. Desde entonces y junto con las dificultades económicas, el proyecto se ha encontrado también con la oposición de esos dos grupos en la anterior legislatura, primero, y de Bildu en la actual, que han apostado desde el inicio por la adecuación de las actuales piscinas del Ereta.
Diario de Navarra
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