Los trabajadores del grupo Azkoyen en Peralta han convocado una nueva manifestación que partirá este sábado a las 12 de las puertas de la fábrica y terminará en la plaza principal de la localidad, en protesta por el anuncio de 69 despidos en las distintas sociedades del grupo, que suman 290 trabajadores en la localidad. La plantilla, que hoy secunda su cuarta jornada de huelga, hará esta marcha en festivo "a petición de familiares y amigos" que quieren mostrarles así su apoyo.
Los despidos afectan sobre todo a la sociedad Azkoyen Industrial (Aisa), que fabrica máquinas vending, con un ERE para 50 de sus 145 empleados. El grupo plantea otros 12 despidos individuales en Azkoyen Medios de Pago (Ampasa) que fabrica selectores de monedas, y 7 despidos más en Azkoyen SA (Asa), la sociedad hólding que da soporte al grupo (administración, finanzas, informática).
La empresa negocia de forma conjunta todos los despidos, tanto los del ERE como los de Ampasa y Asa, con una comisión sindical formada por el comité de Aisa (4 de ELA, 4 de UGT y 1 de CC OO) y varios representantes sindicales de las otras dos empresas, con mayoría de UGT.
Ayer, los presidentes del comité de Aisa y Ampasa, junto a otros dos delegados de la empresa, y el alcalde de Peralta, Juan Jesús Basarte, se entrevistaron con la directora general de Trabajo, Imelda Lorea, para explicarles la situación de la empresa y su rechazo al expediente. "El problema no es que no tengamos trabajo. Es que la empresa externaliza el trabajo. Esto viene por una mala gestión, una compra de una empresa en Alemania (Primion) que salió mal y les ha dejado una deuda de 55 millones. Y la forma más rápida de hacerla viable que se les ha ocurrido son los despidos", indicaba Santi Pérez Sola, presidente del comité de Aisa.
Este mismo argumento fue empleado por sus compañeros, que esa misma mañana, se reunieron con la Inspección de Trabajo que debe informar el ERE y cuya opinión suele ser determinante para que el Gobierno de Navarra lo autorice. El inspector citó también a los directivos de la empresa, a quienes pidió información complementaria.
"El expediente se basa en la deslocalización del trabajo a talleres de la zona, que lo hacen más barato", comentaba Julio Martínez, secretario del comité. En concreto, según diversas fuentes, la empresa se ahorrará 700.000 euros anuales al suprimir las secciones de chapa, pintura, serigrafía e inyección, con 32 puestos directos. El resto del excedente son empleos indirectos vinculados a estas actividades. En Aisa sólo dejará las secciones de montaje, de I+D y comercial. Y en Ampasa y Asa, el excedente viene motivado por la reducción de la carga de trabajo.
La dirección ha ofrecido bajas indemnizadas, con 30 días por año y 12 mensualidades. Y 12 prejubilaciones para trabajadores a partir de 58 años en 2011, con el 70% del salario neto hasta los 61 años. El comité las tacha de "positivas, pero insuficientes". El lunes, en la próxima reunión, harán una contraoferta.
Diario de Navarra
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