lunes, 17 de diciembre de 2012

PEDRO EL BODEGUERO, ECOLOGISTA SIN SABERLO

A finales de noviembre, la Mancomunidad de la Cuenca de Pamplona (MCP) inaugura un pino navideño formado por botellas que son recuperadas en las instalaciones que Pedro José García tiene en Falces. ¿Y quién es Pedro García, "Pedrola"?
"Soy Pedro García Torres, de Falces. He vivido en Bizkaia 31 años y en Navarra otros 31. He trabajado toda mi vida entre bodegueros y embotelladores. Me inicié en este mundo del vino cuando, para el transporte de bodegas a bares, se utilizaban pellejos, barrica y garrafones".
De esta manera empezaba su charla en Pamplona ante políticos, técnicos, responsables de mancomunidades, entidades dedicadas a los residuos y público asistente a las jornadas sobre Sistemas de Depósito, Devolución y Retorno. Una exposición humilde, clara y encantadora, donde su I+D+I superaba con creces todas las demás teorías y tesis que se escucharon a lo largo de la mañana.
Pedro nos descubrió un mundo real de adaptación al medio con el uso limitado de los recursos. Su amplia experiencia en la reutilización de envases le permite afrontar todos los problemas y sus posibles soluciones.
"En 1978 compro una máquina lavadora y comienzo a trabajar con botellas retornables estándar: 6 estrellas y bordelesa; aprendiendo el comportamiento de las botellas retornables y cómo acometer las recogidas y retornos de las botellas. En 1987 compro una empresa dedicada a la reutilización de botellas, consiguiendo dos cosas: hacerme con botellas más baratas y ampliar mi actividad lavando y vendiendo botellas reutilizadas. En este momento me dedico de lleno al mundo de la reutilización".
Es decir, antes de la existencia de los contenedores tipo iglú, ya existía un mercado importante económicamente viable, especialmente con las botellas de cava. Pedro ha pasado de embotellador a reutilizador.
"Diversas causas han hecho que cada día se dé un paso atrás en el mundo de la reutilización de botellas. Cada botella picada y fundida para hacer un nuevo envase tiene un gasto de 100 gr. de petróleo, mientras recuperar una botella, lavarla y reutilizarla tiene un gasto de 5 gramos de petróleo".
Por estas causas, toda la legislación obliga a reutilizar las botellas frente al reciclaje del vidrio o su vertido. Sin embargo, la administración no pone los medios para la reutilización, ni fomenta la misma frente al reciclaje debido a los intereses económicos de los fabricantes de vidrio. Una botella depositada en un iglú supone una botella menos reutilizada y una más fabricada para alegría de los vidrieros.
"La principal difictultad que tengo es la falta de envases, por no tener acceso a la recuperación. Previamente al reciclaje se debería tener acceso a la botellas que son factibles de reutilizar".
La política de las vidrieras es potenciar la destrucción de los envases y para ello entorpecen la recuperación de los mismos creando muchos y variados modelos y no haciéndose cargo del calcín (vidrio roto). Es una lucha continua por hacer quebrar las plantas de lavado. Actualmente, todas las botellas que Pedrola recupera las tiene vendidas.
"Las botellas de vidrio pueden ser reutilizadas hasta 80 veces y más, con un coste energético de 5 grs. de petróleo por botella reutilizada, frente a los 100 grs. de la botella nueva. Es decir, reutilizando una botella hemos evitado consumir 8 kg de petróleo por botella".
Por lo que reutilizar en vez de reciclar supone también una política energética importante, a la vista de los millones de botellas que acaban en iglús y vertederos.

"Al paso que vamos, todo el vidrio de las botellas que llevamos años fundiendo y refundiendo, se recargan y combinan con metales, pinturas metalizadas y otras sustancias que están unidas a los envases cuando se funden, pudiendo todo esto, a la larga, traer problemas para la salud".

Los consumidores estamos tirando el oro negro (100 gr. de petróleo por botella). A una botella hay que darle la posibilidad de vivir. Gracias, Pedrola, porque con tu vida dedicada a la reutilización de botellas has evitado el gasto de toneladas de petróleo. Eso sí es, de verdad, ahorro energético.

Gracias, Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, por poner en valor a este reciclador, pero los amantes de las basuras estaríamos mucho más agradecidos si el vidrio que se recoge en la Comarca, en vez de dárselo a Ecovidrio, dejara a Pedrola que recogiera previamente las botellas enteras para seguir lavándolas y poder llenar Navarra de pinos de botellas retornables.

Jesús Arbizu Txurio, medioambientalista de Pamplona, en Diario de Navarra (13-12-2012)


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