La izquierda abertzale ilegalizada no ha descansado en verano y ha mantenido una intensa actividad, en el marco de su debate interno, para socializar y explicar su apuesta estratégica por las vías políticas y civiles. En este contexto se enmarca la exposición de la iniciativa de Batasuna que tres de sus pesos pesados, Rufi Etxeberria, Iñigo Iruin y Rafa Díez Usabiaga, están realizando en diversos medios y ámbitos, en especial en Madrid. Unos contactos que se han extendido a distintas formaciones vascas, entre las que no están el PSE-EE y el PP.
En ausencia de Arnaldo Otegi, encarcelado, Rufi Etxeberria ha asumido el liderazgo en la izquierda abertzale política, como se evidenció en el acto del Euskalduna, en el que ocupó el primer plano junto al presidente de EA, Pello Urizar. También es significativa la presencia del abogado Iñigo Iruin, uno de los hombres más influyentes, a nivel interno, en ese mundo. Por su parte, el líder del sindicato LAB, Rafa Díez Usabiaga, siempre ha sido encuadrado en el sector más posibilista y ha salido recientemente de la cárcel, en la que permanecía desde octubre, a raíz de la redada en la que se arrestó a Otegi.
Durante todo un año la proscrita coalición ha venido realizando un trabajo con el objetivo de lograr un nuevo escenario político para Euskadi, basado en la soberanía, a través de las vías sólo políticas, y con el objetivo de arrastrar a ETA hacia el final de la violencia. Pese a las críticas del Gobierno y el PP, y la desconfianza del PNV, los dirigentes de la izquierda abertzale se están esforzando, a través de estas reuniones, en defender la sinceridad de su estrategia.
Grupo Correo
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