Desde Batzarre, no queremos caer en el simplismo y el tono insultante que utiliza Aralar para calificar las propuestas políticas de Batzarre dentro de Nafarroa Bai, pues tenemos una actitud sincera de diálogo de cara a buscar un acuerdo programático para reeditar la exitosa Nafarroa Bai del 2007.
En el fondo, lo que está a debate es si acordamos unas bases políticas exclusivamente nacionalistas y con la mirada puesta en competir con el discurso independentista y alejado de la realidad navarra que utiliza la izquierda abertzale, o procuramos una Nafarroa Bai con un espíritu unitario, abierto y pluralista más acorde a la pluralidad que enriquece identitariamente la sociedad navarra, y donde los sectores no solo abertzales sino también vasquistas no nacionalistas y de izquierdas, se sientan representados.
Por ello es importante, a nuestro juicio, consensuar unas bases políticas y programáticas que tengan su centro de gravedad en Navarra, que tengan en cuenta la realidad social y política de Navarra y que por tanto, centre sus prioridades en lograr un buen Acuerdo de Convivencia de Identidades entre todas y todos los navarros, y una mejora en lo que son objetivos compartidos del vasquismo y gran parte de la izquierda, incluida la no nacionalista, esto es, caminar hacia la co - oficialidad del euskera en toda Navarra, estrechar las relaciones sociopolíticas con la CAV, mejorar nuestro autogobierno, el reconocimiento oficial de los símbolos vascos, y una reforma amplia y pactada del Amejoramiento que integre y reconozca al vasquismo, y sea sometida a refrendo popular. Si esto es abrazar el españolismo, vivimos en realidades paralelas y no nos hemos enterado.
En todo caso, esperamos que una actitud firme ante ETA, al igual que en contra de las vulneraciones de derechos humanos por parte del Estado, un apoyo solidario a las víctimas de toda violencia, y la defensa de que no cabe pagar un precio político por la paz, sean consideradas cuestiones éticas básicas en la sociedad del siglo XXI, al margen de que haya quien las considere “españolistas”.
En Batzarre, creemos que estamos en un momento crucial para reeditar la Nabai unitaria, abierta y pluralista que ilusionó con el cambio en Navarra a miles de ciudadanas y ciudadanos. Los simplismos, y la polémica continua, hacen nulo favor a un debate claro, abierto a la base social de Nafarroa Bai, y que trate de recuperar el espíritu del consenso y el acuerdo.
Pamplona-Iruña a 21 de septiembre de 2010
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