Dio bastante que hablar tanto en la edición digital de este periódico como en las redes sociales la entrevista concedida por el joven jugador de golf navarro Borja Virto en la que el titular era No suelo votar; este año igual sí para que no salga Podemos. Virto, de 23 años, por supuesto está en su perfecto derecho de votar y hacer lo que quiera, pero es que previamente había comentado “no me gusta la política ni ningún político”, posteriormente añadió “esos (por Podemos) son muy peligrosos” y remató la faena comentando que sigue “poco” la actualidad. Va a cumplir en menos de un mes 24 años, así que un bebé ya no es, con lo que supongo que se le podrá decir alguna cosa: todos los políticos no son iguales, de la misma manera que todos los jugadores de golf no son pijos con el cerebro de serrín. Si fuesen iguales no habría elecciones. De momento los que son muy iguales son los que llevan gobernando más de 30 años, porque de los otros aún no se puede opinar ya que aún no han gobernado. Si usted hubiese ahondado algo más en por qué ve peligrosos a los de Podemos tal vez se podría entender su postura, tan retrógrada y conservadora, pero como no lo hizo entienda que mucha gente le critique. ¿Peligrosos para quién? ¿Para el enfermo de hepatitis C que ve que se muere y que con el presupuesto gastado en aviones militares o tanques viviría, para el anciano que firmó preferentes, para los desahuciados, para los millones de parados, para los niños que no tienen para desayunar, para sus coetáneos que han tenido que emigrar, con carreras universitarias, que aquí si encuentran trabajo es de 600 euros al mes con suerte, para los que ni se plantean tener hijos porque los pisos están por las nubes, etc, etc, etc, peligrosos para quién? Virto no es sino un ejemplo de un tipo de persona muy extendida. Ni puta idea de qué pasa ni por qué pero que se quede todo igual.
Jorge Nagore, en Diario de Noticias
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