martes, 9 de abril de 2013

UPN, DIARIO DE NAVARRA, MIEDOS Y FRUSTRACIONES


En la agitada vida política de Navarra a que nos ha llevado la inoperancia y el descrédito de Union del Pueblo Navarro en una legislatura agotada casi antes de empezar, la desfachatez de sus principales líderes escondidos tras un muro de silencio que al parecer solo va a poder romper el Juzgado de Instrucción no es algo que nos vaya a sorprender especialmente. El cúmulo de mentiras, rectificaciones, devoluciones, medias verdades y silencios clamorosos se han convertido en el día a día del partido en el DESGOBIERNO, pero hay ciertas líneas rojas que ni ellos ni nadie pueden traspasar en el ejercicio honesto de la política.
Este lunes Diario de Navarra, portavoz y altavoz de UPN, traspasó una de ellas acusando a Uxue Barkos del terrible delito de pedir una subvención para Euskalerria Irratia siendo ella accionista de la misma, atribuyéndole 200 acciones de la sociedad emisora de Euskalerria Irratia, que, según el Diario de Navarra siempre, hacía incompatible el hecho de que la diputada enmendase y votase a los PGE una partida de 150.000 euros destinados a Euskalerria Irratia, y que, por supuesto, y dada la pulsión euskericida de UPN y PP no tenía la más mínima posibilidad. Además, y haciendo gala de un rigor periodístico exquisito, añadía ‘La ley obliga a no participar y abstenerse en los casos en los que existe un interés personal’. Un medio que ha acostumbrado pasar de refilón por el saqueo de la CAN a manos del cuarteto tragicómico ‘los tres imputados y la aforada’ pero que se obsesiona con la pequeña radio euskaltzale de Iruñerria y la diputada que pretendió ayudarla económicamente. Sumándose a la ya larga lista de insidias que han costado a UPN algún paso por el Juzgado y alguna condena por intromisión en el honor
Una vez más el Diario de Cordovilla, al servicio de los intereses del partido en el poder, ha considerado que en política todo vale y que cualquier medio es bueno para poner a los pies de los caballos a quien moleste. A quien moleste o quien sea capaz de alejar la atención de otros temas tan incómodos para UPN como lo es la CAN. Y para ello se sirven de una acusación tan burda que deja al descubierto tanto la nula ética periodística de este medio como la de quienes alientan campañas de este tipo, con el único objetivo de manchar un nombre que les es incómodo.
En el convencimiento de que solo el ejercicio honrado y honesto de la política y de la función de control sobre ella que deben cumplir los medios de comunicación puede regenerar la situación límite a que han llevado a Navarra algunos de quien se dicen servidores públicos queremos denunciar la campaña de acoso que ese medio está lanzando contra Geroa Bai y su diputada.
Comprendemos que cada nuevo barómetro del CIS en que Uxue Barkos resulta una de las políticas mejor valoradas del estado o la formación que lidera sigue avanzando en intención de voto y confianza de los ciudadanos navarros produce pavor entre quienes llevan 35 años dirigiendo la política navarra como si fuera un chiringuito playero, pero eso no justifica que olviden cual es la función de los políticos y los medios y orquesten la campaña de desprestigio al que tiene sometida tanto a Geroa Bai como a su diputada desde que en 2011 se le acusara de usar su cáncer con fines electoralistas, pasando por bochornosas acusaciones sobre cobro de dietas municipales a otra concejala de la coalición que resultaron infundadas o pretendiendo confundir a la ciudadanía mostrando a la diputada de Geroa Bai como la única que realizó 3 declaraciones de bienes ante el Congreso de los Diputados, insinuando fraude, cuando la realidad es que todo diputado tuvo que hacer una primera declaración en cumplimiento de la nueva ley entrante en 2011, una segunda declaración saliente cuando terminó la legislatura, y además todo diputado que repitió escaño tuvo que hacer una tercera declaración entrante para la presente legislatura. En cualquier caso parece que para los titulares del Diario de Navarra solo Uxue Barkos se encontró en esta situación.
La última entrega viene de la mano de Euskalerria Irratia y el pretendido interés de Uxue Barkos en el mismo. Todo ello una semana más tarde de las imputaciones de Sanz, Maya y Miranda y la excusa judicial como aforada de Barcina, aunque esté comprobado que su actividad coincide en tiempo y forma con la de los otros tres imputados.
En otras palabras, el clima propicio para querer desviar la atención hacia otros sectores del arco político, que, oh! Sorpresa, vuelven a ser quienes ven como alternativa de cambio en Nafarroa; Geroa Bai.
Pero suele pasar que cuando se traspasan las líneas rojas de la ética política y periodística, algo a lo que nos tienen acostumbrados tanto el partido que sustenta el DESGOBIERNO de la Comunidad como el rotativo que debiera controlarlo, y en el afán de adecuar los hechos a “su verdad”, sus intereses más bien, se puede caer en el ridículo y el bochorno profesional como lo es acusar a Uxue Barkos mencionando aquello de que ‘la ley obliga a no participar…’, sin haber leído previamente el artículo 28/2,A de la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, donde detalla que para que Uxue Barkos incurriera en ilegalidad, debería ‘tener interés personal en el asunto de que se trate o en otro en cuya resolución pudiera influir la de aquél’ cosa que no es cierta; puesto que establece como interesados los supuestos de ‘ser administrador de sociedad o entidad interesada’ ‘o tener cuestión litigiosa pendiente con algún interesado’ condiciónes que sorpresivamente Uxue Barkos no cumple, salvo el improbable caso de que UPN fuese propietaria de la emisora euskaltzale dado que es con este partido con quien mantiene litigios jurídicos en defensa de su honor.
Luego otra vez más, asistimos a la opera bufa  con que el partido que sostiene el Régimen y su medio de propaganda habitual tratan de entretenernos para que olvidemos representaciones más serias que pueden darse en los Juzgados de Iruña en los próximos días. Y en ese macartismo foral nada mejor que difamar a la diputada que llevó la voz de Navarra a Madrid que tanto les molesta y que temen como alternativa.
Cabe destacar igualmente, como aclara Iruñeko Komunikabideak S.A., empresa editora de Euskalerria Irratia, que fue iniciativa suya el proceso de formalizar las donaciones recibidas para salvar una situación precaria a raíz de la multa impuesta por el Ministerio de Industria de 30.000 euros mediante una ampliación de capital por lo que Uxue Barkos desconocía ser accionista de Euskalerria Irratia, cuando únicamente se consideraba benefactora de la misma al haber aportado 1.200 euros a fondo perdido (lo que vienen a ser 3 cubiertos en una cena de Miguel Sanz, vaya) en un gesto de compromiso euskaltzale, siendo la manera de formalizar la donación un hecho que pocos donantes conocían, al no ser propiamente una inversión sino una aportación a fondo perdido.
Como es público y notorio, además,  Euskalerria Irratia no ha arrojado dividendo nunca.
Solo la actitud sectaria y contraria a su propia cultura del Gobierno de Navarra incumpliendo los requerimientos que desde el Consejo de Europa se le hacen para facilitar el cumplimiento de la Carta Europea de Lenguas Minoritarias, puede explicar el hecho de Euskalerria Irratia tenga que financiarse a base de subvenciones públicas y donaciones particulares al impedir su situación de alegalidad acceder  a las subvenciones públicas de Navarra, especialmente generosas con medios de comunicación afines, y a los contratos de publicidad institucional de obligado cumplimiento para la Administración pública, alegalidad de la que solo es responsable el propio Gobierno negando sistemáticamente su licencia a pesar de haber sido condenado reiteradamente por la Justicia por incumplimiento de sus propias bases reguladoras de los concursos de adjudicación de licencias radiofónicas. Interfiriendo no solamento los legítimos derechos empresariales de Euskalerria Irratia  como el derecho de los euskaltzales navarros al acceso a medios de comunicación en su propia lengua, la lengua de Navarra.
Uxue Barkos con su comparecencia pública antes los medios respondiendo a cualquier cuestión no solo nos ha dado una prueba de la falsedad de las acusaciones vertidas sobre ella sino que ha dado una lección de praxis política a quienes se convocan ruedas de prensa sin preguntas, los que se esconden detrás de un plasma o los que simplemente desaparecen. Ya nos gustaría que quienes se han dedicado a esquilmar la Caja de Ahorros de todos los navarros y navarras hubieran dado una explicación satisfactoria la misma mañana en la que se conocieron las imputaciones, por no decir cuando se conoció de la existencia de las dietas que fraudulentamente cobraban, o lo que es lo mismo, nos robaban a todos los navarros. Pero no hicieron ni una cosa ni la otra; ni salir ante la ciudadanía a dar la cara, ni por supuesto demostrar que no tienen nada que ocultar, porque claramente si tienen qué ocultar, concretamente unos 230.000 €.
En actuaciones como la denunciada aquí se ve la catadura moral de quienes se lucraban de dietas que alcanzaban los 2.600 euros sin función alguna que las justificase, y que para desviar la atención de ellas les da igual emplear la mentira y los medios periodísticos a su alcance, aunque se caiga en el más absoluto desprestigio político, moral y profesional.
Gazteok Bai

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