En rueda de prensa para presentar su último libro, Los viejos camaradas, Carrillo (Gijón 1915) ha reconocido que, debido a los numerosos casos de corrupción en España, "la situación es muy grave en nuestro país".
Al comparar un periodista su buen estado de salud con la mala situación del PCE y de IU, ha dicho que el PCE está "en práctica desaparición" y que "el instrumento político" es IU.
"Mis camaradas comunistas tienen que pensar -ha añadido- que hace falta una refundación de la izquierda distinta a lo que fue el PCE, porque los instrumentos que nos valieron entonces hoy están superados" y hacen falta otros "más abiertos, democráticos y diversos".
Ha precisado que entonces el PCE se creó para la lucha y el cambio social y que ahora lo que hace falta es luchar contra el capitalismo, "que impide el desarrollo humano", lo que es asumido incluso por personas de ideología conservadora.
En su opinión, en esa refundación caben corrientes distintas y ha agregado que "la izquierda tiene que volver a empezar", porque IU "es una versión electoral que se ha quedado reducida" y "no es suficiente, ni la respuesta para la izquierda".
Sobre la situación en Cuba, Carrillo ha recordado que siempre ha defendido la revolución cubana y que de no ser por el intento de invasión desde Estados Unidos por Bahía Cochinos y por el bloqueo americano, "Cuba sería hoy un sistema democrático".
En cuanto a la muerte por huelga de hambre del disidente Orlando Zapata y de la situación de otros presos, ha precisado que "en este mundo todos los días hay gente que muere, que es matado". Ha puesto el ejemplo del ejército alemán en Afganistán que mató este fin de semana a seis personas en una ofensiva o las decenas de miles en Irak y "todo el mundo ve eso normal y no provoca escándalos".
Respecto al libro, ha indicado que se trata de una semblanza de dirigentes del PCE, unos muy conocidos y otros no tanto, que encabezaron la lucha primero en defensa de la democracia republicana y después contra la dictadura franquista.
"Quiere ser un homenaje -ha continuado- a la generación del 36, la mía, a la que le tocó la tarea histórica de tener que enfrentarse al fascismo en España en una terrible y dolorosa Guerra Civil y en el mundo en la II Guerra Mundial".
A su juicio, en esas guerras y en la represión en la época del franquismo se perdieron "infinidad de vidas y de talentos", mientras que la República "abrió de golpe unas perspectivas extraordinarias" a una juventud, que empezó a interesarse por la política y la situación internacional, con un entusiasmo "que no se ha vuelto a ver después". Para Carrillo, "es una especie de milagro ese despertar de la juventud, que ha dejado una huella muy profunda y merece una atención y un recuerdo porque es ejemplar".
Como no había actas de la época de la clandestinidad, ha tenido que confiar en su memoria para hacer esas semblanzas y ha destacado que no es que hubiera un líder, sino una multiplicidad de líderes locales y regionales.
"He escrito esto porque la memoria histórica se pierde al cabo de muy pocas generaciones" ha indicado Carrillo, quien ha dicho que "no vamos a ser recordados más allá de nuestros nietos".
Agencia Efe
No hay comentarios:
Publicar un comentario