"Las opiniones son libres" decía el presidente del Gobierno Mariano Rajoy a propósito de la imagen compartida por algunos sectores de la ciudadanía catalana sobre que el Estado habría desaparecido de Catalunya las horas posteriores a los atentados a La Rambla y Cambrils del 17 de agosto. La cuestión es que Rajoy ha decidido comparecer ante las cámaras después del Consejo de Ministros este viernes para relatar todas y cada una de las acciones que emprendió el Ejecutivo el día de los hechos y posteriormente, y ha hecho también un claro llamamiento a la "unidad política" entre administraciones como forma de combatir el terrorismo.
"El mismo día del atentado estaba allí todo el mundo, lo mismo pasó los días siguientes. El Gobierno también tiene su opinión", se ha defendido Rajoy con una media sonrisa de incredulidad, después de que su primera aparición pública el 17-A fuera en la noche del jueves, siete horas después del atropello. Pero más allá de su afirmación, la rueda de prensa del presidente evocaba poderosamente a la de este lunes mismo, cuando el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, resaltó también el papel del Estado, como adelantaba El Nacional.
El hecho es que el Estado no empezó a hacerse visible hasta el 18 de agosto y fuentes de la Moncloa apuntan a la normalidad del hecho. Dicen que así queda recogido en el Estatuto de Autonomía, que asigna al gobierno autonómico la primera respuesta al atentado terrorista. Ahora bien, reconocen que la rueda de prensa de este viernes era para exponer "una sucesión de los hechos" y asumen cierta descoordinación por ambas partes –tanto de Gobierno español, como catalán– y autoridades policiales.
Esta afirmación llega una vez se ha conocido que la policía española investigaba al Imán de Ripoll sin haberlo comunicado a los Mossos d'Esquadra. Rajoy ha pedido "dejar trabajar al juez", y ha dicho que las fuentes apuntan a no quedarse solo con esa información, porque habría otras "que se desconocen y forman parte de toda la investigación y abordaje" de estos temas.
Ahora bien, Rajoy ha resaltado los puntos de "coordinación institucional fluida y constante" en su discurso, que ha leído de una hoja, sentado y mirando a cámara. Primero, ha alabado a los cuerpos de seguridad, principalmente a los Mossos, "que junto con la Guardia Civil y la Policía Nacional salvaron la vida de muchas personas" en casi menos de 100 horas. En segundo lugar, ha recordado que la primera acción institucional fue la creación de un gabinete de crisis "para reforzar la coordinación entre las administraciones". "Siempre hubo allí miembros de la Guardia Civil y la Policía Nacional", ha insistido.
Al respecto, el jefe del Ejecutivo ha señalado que Gobierno y Generalitat se reunieron y, acto seguido, él compareció con el president de la Generalitat, Carles Puigdemont. "Quiero destacar el máximo nivel de cooperación y lealtad durante la reunión", ha apuntado. Más tarde, "la vicepresidenta [Soraya Sáenz de Santamaría] recibió a los ministros de Exteriores de los otros países" en la delegación del Gobierno, junto al delegado Enric Millo, ha recordado, y los reyes "visitaron a las víctimas", ha dicho.
En la Europol, quizás
Rajoy ha dejado en interrogante la integración de los Mossos en la Europol, después de que miembros del Ejecutivo cuestionaran el acuerdo suscrito en la Junta de Seguridad de Catalunya, el pasado julio. "Hay un sistema de integración europea, en cada país de la Unión Europea hay una oficina nacional, en España lo lleva la Policía, la Guardia Civil, los Mossos, y la Ertzaintza", ha expuesto, antes de esquivar el tema. "Cuantos menos debates públicos sobre operativa de seguridad, mejor," ha dicho, y ha recordado que estos sistemas se "adaptan" con el tiempo y que la "prioridad" son las víctimas.
Reforma del Código Penal
El relato ha ido acompañado de la explicación sobre la actuación posterior de la Moncloa. Primero, que Interior decidió mantener el nivel de alerta antiterrorista en 4, después de reunirse con los expertos. Segundo, ha recordado que su Ejecutivo ya reformó el Código Penal hace años, y no ha descartado la posibilidad de volver a reformarlo para endurecer las penas. También ha dicho que organismos de Interior habían hecho un trabajo consistente en recoger avisos sobre focos de radicalización, ofrecer servicio a las víctimas y aligerar la obtención de los visados para sus familiares extranjeros.
"La unidad política"
Con el horizonte del 1 de octubre y la batalla de PSOE y Podemos en el Congreso, Rajoy ha insistido en la importancia de la "coordinación policial, la unidad política y la cooperación internacional", como forma de mantenerse "grandes y fuertes contra los asesinos". "La unidad política es fundamental, es lo que quieren las víctimas y tiene que ofrecer resultados en forma de mejoras", ha concluido. Por ello, en la Moncloa creen necesario que todas las fuerzas en el Congreso firmen el Pacto Antiterrorista (ERC, PDeCAT, Podemos, PNV y EH Bildu no lo han hecho). Por otro lado, España ha pedido al presidente francés, Emmanuel Macron, abordar la mejora de la coordinación europea en materia de lucha antiterrorista, en la cumbre que se celebrará el próximo lunes en París, y en la que participarán Francia, España, Italia y Alemania.
Por último, ante las preguntas relativas a la polémica en torno a la asistencia de Felipe VI a la manifestación, Rajoy se ha plantado y ha apuntado que "el principal culpable de lo ocurrido son los terroristas". Igualmente, ha valorado "muy positivamente" que esté el Rey para ofrecer su afecto y representar a los ausentes. El jefe del Ejecutivo ha hecho un llamamiento a toda la ciudadanía a acudir a la manifestación para expresar su rechazo al terrorismo.
elnacional.cat
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