El pasado martes, Carlos Carrizosa, el portavoz de Ciudadanos en el Parlament de Catalunya, afirmó ante los medios que su partido estudiará cómo relacionarse con Vox. Esto ocurriría en el hipotético caso de que el partido de Santiago Abascal se hiciera con representación parlamentaria tras las elecciones que tendrán lugar el próximo 16 de febrero. Desde hace semanas, todas las encuestas coinciden en la llegada de Vox al Parlament.
Ante la alarma generada tras darse a conocer la probable entrada de la ultraderecha, Carrizosa ha declarado que los ‘ultras’ ya llevan tiempo en la Cámara. De esta forma, se ha referido a los miembros de los partidos independentistas como Quim Torra o Pere Aragonès. Sus declaraciones han provocado la reacción de uno de los aludidos, Aragonès, quien le ha recriminado los pactos del partido naranja con Vox en otros territorios: “Lecciones de Carrizosa, ni una”.
Cabe recordar que la postura del partido liderado por Inés Arrimadas es distinta según la ocasión. Por un lado, la formación naranja gobierna gracias a una alianza con Vox en los territorios de la Comunidad de Madrid, Andalucía y Murcia. Sin embargo, Ciudadanos a veces opta por tomar distancia discursiva con el partido de Abascal para tender la mano al Gobierno, como lo hizo en la aprobación de los Presupuestos. Unos vaivenes que ponen en duda la credibilidad de la formación naranja.
Para Jaume Asens, presidente parlamentario de Unidas Podemos y de los Comunes, el acercamiento entre Ciudadanos y Vox carece de sorpresa. El político ha recordado que Ciudadanos floreció en Catalunya a través de la confrontación, por lo que no resultaría extraña una alianza con Vox, quien, de una forma más radical, se nutre de lo mismo.
“Le diría a la formación de Arrimadas algo que ya le dijimos a Rivera tras la debacle electoral: Cuando agitas las banderas del odio y la confrontación siempre aparece quien odia y confronta más que tú. Ciudadanos podría ser víctima de su propio discurso incendiario”, ha reflexionado Asens. Con esto, el diputado de la formación morada ha recordado que la entrada de Vox en el Parlament supondría la disminución representativa de, al menos, otro partido, que podría ser el de Carrizosa.
Todo apunta a que las elecciones del próximo febrero dejarán un escenario político con, según las encuestas, nuevos diputados en el Parlament. Y es que la llegada de Vox y, por lo tanto, de la ultraderecha a Catalunya parece estar cada vez más cerca.
Lorena Gómez, en La Última Hora
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