LA DISCRIMINACIÓN DE GÉNERO TAMBIÉN INFLUYE EN LA SALUD

La discriminación de género también influye en la salud. Según la última encuesta sobre condiciones de vida del Instituto de Estadística de Navarra (IEN), las mujeres sufren más problemas que los hombres pese a que en aspectos como el consumo del alcohol o del tabaco sus actitudes son mucho más responsables. Especialmente llamativo es el capítulo referido al tipo de dolencia ya que el colectivo femenino que dice padecer problemas supera en diez puntos (un 38,8% frente a un 28,2% que los hombres) mientras que en el apartado específico de problemas de depresión o ansiedad duplica la tasa ya que un 15,3% de mujeres aseguran sufrir este tipo de situaciones frente a un 7,6% de hombres. Las enfermedades relacionadas con la salud mental son la tercera causa de problemas asociados con la salud a solo 5 décimas de los relacionados con la movilidad (11,5% frente a un 12,1%) aunque aún lejos de los englobados bajo el epígrafe de "dolor o malestar", que supone un 33,5% de los casos.

No obstante, lo cierto es que en general la percepción de los navarros y navarras sobre su estado de salud es bastante positiva. El 70% de los navarros considera que su estado de salud es bueno, según la Encuesta de Condiciones de Vida 2007 que ha sido dada a conocer por el Instituto de Estadística de Navarra. Se trata de una encuesta para la que se han utilizado indicadores tanto subjetivos, como la percepción que las personas tienen de su estado de salud, como objetivos o cuantificables, como los cigarrillos que una persona fuma o la cantidad de alcohol que toma a lo largo de la semana.

Así, el estudio hace especial hincapié en el capítulo dedicado al tabaco y al alcohol por ser dos de los factores determinantes de la salud, cuestiones que se dan con mayor frecuencia en los hombres, aunque éstos acudan menos al médico y tengan una percepción de su salud mejor que la de las mujeres.

En este sentido, el estudio señala que la mayor parte de los navarros, el 71,5%, piensa que su estado de salud es bueno, pero entre ellos el optimismo es más patente en los hombres, pues el 74,2% calificaron así su salud, frente al 68,8% de las mujeres.

En una escala de valores del 1 al 100, los encuestados otorgaron una puntuación a su estado de salud actual, y las marcas recogidas constataron que para el 7,6% su estado de salud es inferior a 50 puntos, el 27,8% valoró su salud entre los 50 y los 74 puntos y el 64,6% la considera en valores superiores a los 74 puntos.
No obstante, un tercio de la población tiene problemas relacionados con limitaciones en la movilidad, dificultad para el cuidado y el aseo personal, depresión, ansiedad o problemas para realizar actividades cotidianas.

Además, el análisis revela que el 73% de la población ha acudido al médico en los últimos doce meses, (un número medio de cinco consultas por persona), uno de cada cinco ha acudido a urgencias y uno de cada diez ha estado hospitalizado. La edad también es un factor importante ya que el 84,4% de la población de 15 a 44 años afirma tener una buena salud frente a sólo un 45,4% de mayores de 65 años.

Tanto la edad como el género penaliza en materia de salud. El informe demuestra cómo los grupos de más de 60 años y especialmente de mujeres ofrecen unos datos peores. Sin embargo, llama la atención la excepción de los afectados por el binomio ansiedad/depesión cuyo grueso se concentra en el tramo de 45 a 59 años. Por otra parte, el 28% de los encuestados confesó que en los últimos quince días había tomado algún medicamento sin prescripción médica, un error en el que caen en mayor medida las mujeres, que se automedican de más a menos según son más mayores, y la mayoría lo hace con analgésicos, antiinflamatorios, ansiolíticos o antibióticos. El hecho de que uno de cada cinco encuestados se autoreceten ansiolíticos es también significativo de la importancia de las dolencias psicológicas. Las mujeres también se automedican más que los hombres. No obstante, la evolución en edad es diferente aquí ya que ellas se automedican más cuando son jóvenes (casi la mitad lo hacen con menos 24 años) mientras que los hombres se van automedicando más conforme cumple años llegando al pico entre los cuarenta y cincuenta años.

Diario de Noticias