Murillo el Cuende, o Murillete como es conocido en la comarca, cuenta desde el 1 de noviembre con un libro de fotografías antiguas y retazos históricos y etnográficos, El paso de los años (testigo de la historia) . El autor es Jesús María Ederra, un murillés de 57 años residente en Pamplona pero que no olvida su pueblo. "Había visto estos libros en otras localidades, así que me animé y en abril de 2007 empecé a pedir fotografías antiguas", confiesa. Recopilar el material no le costó mucho tiempo, "más difícil fue dar con la idea de lo que quería hacer".
El libro incluye más de setecientas fotografías, aproximadamente la mitad de ellas rostros de murilleses desde principios del siglo XX hasta la actualidad, de las veinte familias que han cedido sus fotos: Abaurrea, Aguirre, Amadoz, Andía, Ardanaz, Azpíroz, Bezunartea, Díez, Ederra, Garde, Garrués, Irigoien, Lacasta, Landibar, Nicolay, Ongay, Sagardoy, Urla, Valencia y Zubieta. La otra mitad son fotos de fiestas, acontecimientos familiares, religiosos o escolares, divididos por épocas. También recoge el resumen de un trabajo sobre la historia de Murillete que realizó en los años 50 Alejandro Díez, párroco del pueblo y tío del autor; un texto del periodista Bingen Amadoz sobre la patrona, Santa Fe, y otro del mismo autor sobre los apellidos de Murillo el Cuende, fruto de una amplia investigación que puede verse en la web www.murillete.com . "Nuestro pueblo tiene una particularidad, todos los apellidos son vasconavarros y, además, según ha investigado Bingen Amadoz en la genealogía local, provienen del apellido Azagra, de forma que todos somos parientes", señala Ederra. La obra termina con fotos comparativas del pasado y presente de los edificios significativos: la escuela, el ayuntamiento, la plaza o la estación ferroviaria, hoy abandonada, "donde paraban ocho trenes al día", recuerda el autor.
Todo este material conforma un volumen de 300 páginas, que ha sido muy bien acogido. "A la presentación vinieron 200 personas y ya se han vendido más de la mitad de los 300 ejemplares editados", expresa con satisfacción Ederra. La edición le ha costado unos 10.000 euros, de los que 2.500 ha aportado el Ayuntamiento y otros 2.500 el Concejo. El resto se financia con la campaña Tú eliges, tú decides de Caja Navarra y los ingresos por la venta, a 15 euros el ejemplar, que puede adquirirse en jm.ederra1@ono.com . Por contra, Ederra está desilusionado con la actitud del Gobierno de Navarra: "Sólo me compraron un ejemplar, para la biblioteca de Tafalla, y para cobrarlo tenía que hacer tanto papeleo que al final se lo regalé", lamenta.
En Murillo el Cuende viven en este momento veinte familias y seis más tienen casa y acuden en vacaciones. El censo del INE asciende a 48 personas, aunque Ederra asegura que un día normal sólo viven 38. Contrasta esta cifra con las viejas fotografías de los años 30 y 40, en las que aparecen hasta 31 niños en la escuela. Eran otros tiempos.
Jesús María Ederra dejó Murillo el Cuende muy joven, a los 9 años, cuando salió del pueblo para estudiar en el Seminario. Más tarde cursó Oficialía en Estella e Ingeniería en El Sario, antes de trabajar en la empresa Iberdrola, primero en Bilbao y desde 1985 en Pamplona. Siempre le gustó volver a Murillo, el hogar de sus padres, y aún con más frecuencia en los últimos años. "En un momento me di cuenta de que siempre había estado fuera y de que quería volver a casa, ir con mi padre a la huerta...". En los años noventa, con José Ramón Amadoz y otros crearon una sociedad cultural que canaliza las inquietudes de los vecinos. "Hay teatro, cine, conciertos corales, hacemos excursiones... Yo, como estoy en Pamplona, me encargo de las tramitaciones", señala Ederra. Se trata de "hacer algo por el pueblo que me ha dado la vida, devolverle de alguna forma todo ese cariño", asegura. Aunque había escrito sobre temas técnicos relacionados con su trabajo, nunca había publicado un libro y ahora, a la vista del resultado, no le importaría repetir. Ya está investigando en el archivo municipal y los vecinos le siguen ofreciendo fotografías, así que no descarta
(Diario de Noticias)
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